¿Cuál es la salida en una habitación sin puertas? Sin el tiempo necesario para vivir, ¿Una eternidad no es mucho para sufrir? Para un demonio no hay sentido a las respuestas, pues su orgullo consigue más que cualquier solución. Pronto las partículas de arena se deformarán sobre sí mismas hasta convertirse en finas espinas que penetrarán la piel del cautivo, con el fin de absorber su alma en caos.
La agonía constituía formas morbosas a lo largo del cuerpo inerte de Lucifer, mientras las arenas terminaban su trabajo al cubrirlo por completo.
Bajo esas capas de místicas arenas yacía consternado, a una alta presión nuestro demonio magullado, en efecto, siempre a él le tocaba la peor parte de entre tantos caminos y senderos del destino. Siempre soportando el dolor, el cual era su alimento predilecto, capaz de entregarle esa solides exquisita de un rey de alta clase.
Bajo esas capas de místicas arenas yacía consternado, a una alta presión nuestro demonio magullado, en efecto, siempre a él le tocaba la peor parte de entre tantos caminos y senderos del destino. Siempre soportando el dolor, el cual era su alimento predilecto, capaz de entregarle esa solides exquisita de un rey de alta clase.
¡Maldito de mi hermano! -pensaba en lo profundo el demonio-. Mientras, un extraño sonido perturbó el silencio agónico que dominaba el ambiente.
De pronto la presión cedía, nuevamente sentía sus articulaciones libres. Volvía a ver el desierto maldito aunque poco distinguía entre tanta sombra y revoloteo. Qué es lo que esta ocurriendo fue lo último en cuestionarse antes de perder el conocimiento.
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| Comenzando a ver la realidad; su debilidad, su locura. |
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